Por fin el nombre: ¡Rayuela!
La vida es como un bumerang que va y viene y, a veces, un juego. Con frecuencia se vuelve al punto de partida antes de concluir el viaje; se juega otra vez, se sigue saltando y al final del esfuerzo, con constancia y con suerte, se llega a la casilla del “cielo”. ¡Rayuela! Una mañana……