Todo parece haber vuelto a la calma, pero no hay que engañarse. Porque los clubs más poderosos de Europa (Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Manchester United, Juventus de Turín, Bayern de Munich etcétera) seguirán “conspirando” para hacer su club exclusivo, El Club de los Ricos.
Esa especie de club social elitista en el que los aficionados desposeídos del dogma, es decir, de la creencia de que el más débil puede ganarle al más fuerte… al menos una vez (¡con una vez en la vida sería suficiente!) se convertirían en meros consumidores del producto “fútbol” y de todo lo que en torno a él se genera.
Porque hoy más que nunca es necesario volver a esa primigenia pasión, en la que competir y luchar por unos colores era la principal seña de identidad.
Por eso la afición ha dicho ¡basta!; la afición inglesa principalmente. ¡Basta! Basta a ese intento de hurtarle al más débil la posibilidad de ganarle al más fuerte. Y es que si al aficionado le quitan esa posibilidad de que su club participe en esa competición de todos contra todos, ¿qué les queda? Solo comprar camisetas, pagar por ver los partidos en la televisión y aplaudir… Pero la realidad es que sin esa quimera… a la afición al le devalúan su religión.
De esto es de lo que hablo en mi artículo en eldiario.es. Aquí tienes el enlace:
https://www.eldiario.es/opinion/tribuna-abierta/futbol-religion-moral-alcoyano_129_7888001.html