Madeira, el jardín vertical infinito
7. Fiesta gastronómica, conejo y epílogo
¿Quién fue el que dijo que no iba a moverse del sillón este sábado? Como si fura eso posible… Nada más concluir el ritual del desayuno, Eva y el Estoico, Mara y yo, decidimos darnos un paseo por una levada que hay cerca de casa. “Para estirar las piernas”, dijimos. El paseo no…