6. Extraños en el tren y el ritual de las fronteras
Dejamos Irkutsk una mañana luminosa con la sensación de que teníamos que habernos quedado más tiempo. Habíamos pasado cuatro días disfrutando de aquel rincón de la tierra, donde el mar interior, que es el lago Baikal, esconde inescrutables secretos, alimenta leyendas y almacena la mayor reserva de agua dulce del mundo. Pero fue subir al…