Sonata de otoño

 

Tú, obediente, le dices al Estado o a tu Comunidad Autónoma, y a su brazo armado que es la Agencia Tributaria, que cuando llegue el momento te cobre los impuestos. Eres obediente. El Poder da la orden y allá te las veas si tienes o no fondos para pagarle.
Si eres previsor habilitas fondos y quitas de aquí y de allá, les pagas, te cobran y luego se lo gastan los dineros en lo que reconocemos como justo: pagar a funcionarios, seguridad, carreteras… Pero también en despilfarros injustos, ¡muy injustos! Por ejemplo, aquí, en Andalucía, en financiar de forma escandalosa a la Sanidad Privada hasta provocar que el sistema sanitario público colapse y reviente las costuras, como se está comprobando estos días con el affair Cáncer de mama.
O se lo gastan patrocinando a sus amigos y promoviendo eventos culturales como aquel que relataba hace unos días el periódico digital ctxt.es (https://ctxt.es/…/Troy-Nahumko-Bienal-Vargas-Llosa…) con un artículo sin pelos en la lengua en el que se da cuenta del despilfarro de 650.000 € de los contribuyentes (¡650.000!) en la VI Bienal de Novela Vargas Llosa, en Cáceres, acto al que asistieron, según cuenta el autor, cuatro damas desoladas y un hombre soltero despistado que pasaba por allí… Lean, lean, y comprueben.
La cosa es que yo, como una gran mayoría, queremos pagar impuestos. Nos parece justo.
Pero lo que no queremos es que haya un trato desigual e injusto: Si el Estado cobra el día y a la hora que dice, lo justo sería que a mí, a ti, a todos, se nos atendiese en el hospital cuando lo necesitamos, no varios meses después… O nunca porque ya nos hemos muerto.
¡Feliz día de Todos los Santos y Difuntos!

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